Mi ingenua alma

un día escuche tu sueño, era nuestro sueño, te veías tan feliz pensando que lo podrías lograr, en un momento yo también quise creerlo, quise creerte, quise creerme, quise creer que juntos podíamos llegar a cualquier lugar que Quisiéramos , pero ahora me doy cuenta que no, que estamos varados aquí, que jamas salimos de la orilla, solo nos fuimos en ilusiones, que solo nos sustentabamos de ilusiones vanas, de cosas que jamas llegaran. Hoy te veo sufrir, por que no logras tus metas, y yo también sufro, por que en esencia yo soy parte de ti, yo me alimento de ti, yo vivo de ti, no se que debo hacer, no hay nada que pueda decirte, sabes que no puedo mentirte, pero la verdad terminaria con tu existencia y prefiero tenerte en agonía, pero tenerte...
Prefiero verte sufrir, a no verte,

prefiero ver tu piel azulada, a jamas haber sentido la suavidad de tu piel,

esa piel rosa, que hoy se tiñe de rojo.

pero prefiero sentirte así, es egoísta de mi parte,

pero se que aceptaras el hecho de ser naufrago en esta vida, a ir a la deriva, a dejar de preocuparte por todo, debes seguirme, yo te llevaré por un camino, nuestra senda, es esta la que nos llevara a nuestra tan ansiada vida en el inframundo, allí estaremos juntos por la eternidad, nuestra eternidad, podre tocar tu piel día y noche por el resto del tiempo que en esta vida nos ha sido tan inhóspita, pero allí tendrás todo mi tiempo para ti, me convertiré en tu siervo, y disfrutare de las delicias de tu piel.