Esperanza mía

Clavo mi puñal en ti, parece no molestarte, de hecho te agrada. tu rostro inexpresivo se ve inquieto, pero mejor que nunca, jamás te vi con tal entusiasmo acercarte a mí, cada vez que clavo mi daga te acercas mas, mientras más te repelo más me envuelves.
Me rehúso a creer tus mentiras, ya sé que solo son mentiras, pero eres más fuerte que yo, la sangre que gotea tu cuerpo se desvanece antes de tocar el suelo, mis manos manchadas de ti florecen, con una flor ilusoria, se que pronto se Romperá, miro aquella flor tan hermosa, y segundo, a segundo la veo palidecer, pierde su color, ese color rojo sanguíneo, se torna cada vez más oscuro, sombrío y triste. Es en este momento donde advierto la verdadera trampa, sin pensar he vuelto a caer, tú rostro imperturbable advierte una leve sonrisa, has ganado, me has hecho creer, volviste a ilusionarme con cosas imposibles.
Es el momento de darte muerte, debo matarte antes de recibir nuevamente una flor, una flor más bella aun, debes morir, debo verte sucumbir en mis brazos para así asegurarme de tu muerte, debo ser yo la ultima en saborear tu espiración, debes verme a los ojos cuando los cierres por última vez, debes abrazarme por última vez para poder olvidarte, debes morir.